La pérdida de la inocencia al igual que la varicela resulta
incomoda cuando eres pequeño pero peligrosa a edad adulta. He podido con todo,
desde el caso del político mangante de tres al cuarto como con los casos de
corrupción más sangrantes que asolan de punta a punta a este país cuya lista es
interminablemente contagiosa; desde la absurda ocupación de un despacho oficial
para negocios particulares del hermano de Alfonso Guerra hasta la corrupción más
absoluta de todos los casos que hoy
descorazonan a este país y que tienen engangrenada a nuestra casta política.
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Vacunado con la actitud de quien hasta hoy consideré un
hombre de estado, más allá de sus errores y de sus aciertos, Felipe González ha
supuesto para mi durante todos estos años la triple vírica y hasta la
antitetánica capaz de librarme de la merecidísima inquina hacia quienes han
hecho una cueva, la de Ali Babá, de este país.
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Pero hete aquí que la vacuna ha caducado y lejos de curar ha
supuesto una reacción vírica capaz de tumbar al más saludable de los ciudadanos
y hoy Felipe González Márquez ha mutado a la bacteria Yersinia pestis, más
conocida como la peste, porque apesta su dimisión hace un mes como presidente
del Consejo de Participación de Doñana, órgano garante de este espacio
protegido. Porque apesta su puesto en la empresa Gas Natural que es la que ha
obtenido permiso para almacenar gas natural en Doñana poniendo en peligro la
biodiversidad de la que presumimos. Mal vendido te llamo.
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Me cuidé muy mucho de los agentes patógenos que infectan
la política, concejales, alcaldes,
consejeros, presidentes y hasta de los alérgenos de la Casa Real pero no te vi
venir. Me has traicionado a mí y a mis ideales porque has vendido los tuyos y
hoy no me dueles, pero me causas dolor. A mis 43 añadas, que me rompas la inocencia
sobre aquello que creía duele y no sabes de qué manera. Y me da que ni pagando
el puñetero euro por receta exista quien me expida una capaz de curarme. Igual
sobornando a algún medico consigo que me
recete sustancias prohibidas que no curan pero alivian.
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