jueves, 16 de septiembre de 2010

De nuevo los andaluces



Un mensaje subliminal es aquel que está diseñado para pasar por debajo o al contrario por encima de los umbrales de percepción, en otras palabras este mensaje no se capta de forma consciente por una persona. Estos mensajes llamados subliminales pueden estar en distintos medios visuales o en medios auditivos.

Aquí muestro de forma, quizá demasiado evidente, una forma de publicidad subliminal. En el primer caso el publicista relaciona lo perjudicial del tabaco con el trágico acto terrorista de las Torres Gemelas de forma tal que el observador asocia la muerte de miles de personas con el tabaco. En las otras dos imágenes relaciona el consumo de bebidas alcohólicas así como el consumo de helados con el sexo. Dos botellines de cervezas o tres helados fotografiados desde el ángulo pertinente muestra en ambos casos dos figuras femeninas de cintura para abajo.




Ahora observen el video de este anuncio televisivo como lo haría cualquier persona que, sentada en el sofá de su casa, hace tiempo para mejores menesteres. A priori no va más allá de la loable intención de dar ánimo a una población deprimida por las consecuencias económicas y hacer ver que con la formación adecuada se puede llegar a conseguir un trabajo.

Si nos paramos a pensar y ver más detenidamente el mensaje que lanza veremos que todos los parados son andaluces, alguno incluso de aspecto paupérrimo. De nuevo, y hasta aquí puedo estar casi de acuerdo, Andalucía aparece reflejada como el principal ejemplo de paro y pobreza en toda España. Ahora bien, si algo me enerva y me indigna por antonomasia es el hecho de que el educador o instructor, no tiene acento andaluz. Tenemos pues el mensaje de que en Andalucía mas menos que somos los únicos parados de toda España y por otra que la persona que se le supone un nivel académico superior, estatus de no parado, y por ende de una posición social más acomodada no encaja en el perfil de andaluz.

Una vez más mostramos aquí un ejemplo del sentir de una gran parte de la sociedad española. Políticos, empresarios, publicistas y tanta gente que menosprecia y minusvalora a esta comunidad autónoma.

Algunos de forma directa como políticos o grandes empresarios no se cortan a la hora de mirar con desdén, arrogancia y displicencia a la sociedad andaluza, otros, de forma subliminal lanzan mensajes que calan en la sociedad y que perduran en la conciencia del resto de españoles. Claro ejemplo lo tuvimos con la afamada serie de televisión Médico de familia donde una vez más la chacha tenía acento andaluz y representaba el arquetipo del andaluz tontorrón que tanto les gusta a muchos españoles con tal de sentirse un tanto superiores.

Me niego a aceptar esta actitud que una vez más muestra lo andaluz como una sociedad de segunda o tercera clase en esta España que a veces no se merece quererla tanto.

2 comentarios:

David Rodríguez Jiménez-Muriel dijo...

Vamos a ver... Aquí el problema empieza cuando uno ya ve lobos por todos lados... No creo que haya nada intencionado en la campaña televisiva (campaña además de una televisión concreta, dentro de su "doce meses, doce causas")y menos buscando la ridiculización del andaluz. El problema es el que se quiera sentir ridiculizado. A mí nadie me va a faltar al respeto por aguijonear al sur de España. Simplemente, hermano, simplemente, porque para poder progresar habrá que empezar a reconocer que en efecto, tenemos tantas cosas que nos hacen ridículos, que ya es hora de poner los espartos.

Nadie se rasga las vestiduras (antes bien lo defiende) porque en Andalucía se haya configurado el peor de los sistemas educativos de España y que se priorice en la política regional, el cuido de sinvergüenzas, caraduras, flojos y aprovechados gubernamentales, PER (o como se llame ahora) aparte.

¿Tendrá culpa de nuestro atraso (en cualquier medidor social que queramos tomar) respecto de las demás regiones de la Nación, la treintena de años de Gobierno socialista? Por supuesto. Sin duda. Más culpa de la que nos creemos. Y sin embargo, saldrá reelegido.

Lo siento, esta es una Comunidad de catetos, incultos y trápalas... No hay otra. Podemos estar hasta que llegue el Juicio Final discutiendo sobre ello, y poniendo como ejemplo a nuestros Nóbel o a los pintores del barroco; pero el último nóbel fue Aleixandre y el barroco murió hace al menos 250 años. De manera que de las rentas no se puede vivir.

Quizás toque ahora llorar, y echarle la culpa al señorito terrateniente a caballo que explotó al andaluz trabajador y echado para adelante. Un cojón de pato. Menos llantos y a quien le escueza que en el resto del Universo nos consideren brazado de flojera, manual de juerga y capital de los parados (pero subvencionados) que reconozca que con el PSOE no vamos a llegar a nada. Y que tras treinta años, tomando sus frases, en efecto a Andalucía no la reconoce ni la madre que la parió, porque es que no hay manera de salir del último puesto.

Vamos, que si España es el culo de la UE, Andalucía es la almorrana del culo.

Y si ahora me apuras, que se entristezca de esto el andaluz. Yo soy español de Granada (o de Motril), pero no andaluz. El que lo sea, lo siento por él. Pero que no se lamente de una realidad palpable, que la cambie en las urnas. Si no, menos llantinas a destiempo y a deshora.

marcemdn@gmail.com dijo...

buenoooo....el vídeo me ha gustado poco...pero el comentario de David. me ha dejado aún mas estupefacto. gracias y adiós! huyo de éste blog ahora mismo!!